3.3 Marcadores del discurso

En este apartado vamos a repasar los marcadores del discurso o conectores, que son los elementos que van indicando la unión, avance y relación de unos enunciados con otros. Debes tenerlos siempre presentes a la hora de confeccionar tu propio texto, ya que con ellos conseguirás enlazar a la perfección unos enunciados con otros y conseguir así que tu texto aparezca plenamente cohesionado. A continuación te presentamos los más significativos.

Conectores semánticos: Relacionan bloques o partes de un texto. Se usan con varios fines:

  • para seguir con la misma idea (además, incluso, aparte…) 
  • para oponerse a otra idea (sin embargo, antes bien, en cambio…)
  • para indicar consecuencia (por tanto, por consiguiente, pues, de ahí que, y, así…)

Marcadores metadiscursivos. Entre ellos distinguimos:

  • Los organizadores, que indican orden (en primer lugar, en segundo lugar, después, por fin…); introducen un comentario (pues bien, bien, pues, siendo así…), o señalan una digresión (a propósito, por cierto, también, en cuanto a…).
  • Los reformuladores, que explican (es decir, esto es, o sea, de otra manera…), rectifican (mejor dicho, más bien…), recapitulan (en conclusión, en definitiva, en suma…), o marcan superación o distancia (de todos modos, en todo caso…).


Marcadores conversacionales. Diferenciamos:

  • De contacto (¿eh?, ¿sí?, ¿me entiendes?, ¿vale?…).
  • De evidencia (claro, sí, por supuesto…).
  • De aceptación (hombre, bueno…).

Si quieres revisar una lista más completa de los conectores textuales, esta enumeración puede servirte: 

  • De enumeración: Resultan especialmente útiles para ordenar las ideas dentro de un texto: en primer lugar, por otra parte, a continuación, finalmente, de un lado, de otro, por último, en fin, primero, segundo, tercero…
  • De oposición: Se usan para contraponer ideas o para corregir lo expresado anteriormente: sin embargo, ahora bien, al contrario, mejor dicho, en cambio…
  • De causa: Sirven para explicar los motivos de unos hechos: porque, pues, por eso, luego… 
  • De consecuencia: Estos, en cambio, explican las repercusiones de los hechos: por consiguiente, en consecuencia, por lo tanto, así que… 
  • De valoración: Permiten opinar sobre lo que se dice, por lo que su presencia es muy abundante en los textos de carácter subjetivo:  a mi modo de ver, desde luego, en el fondo, por supuesto, desde mi punto de vista, ni que decir tiene que, en mi opinión, sin duda, por suerte, por desgracia, menos mal que…
  • De ejemplificación: Sirven para ilustrar y ayudar a entender el contenido del texto: por ejemplo, como muestra de ello, así…
  • De adición: Permiten añadir información a lo que se está diciendo: y, del mismo modo, también, además, igualmente, asimismo, en esta misma línea, en ese sentido, a ese respecto…
  • De reformulación: Pueden servir para introducir un resumen de lo dicho (en resumen, en conclusión…) o para parafrasearlo o decirlo de otro modo: es decir, dicho de otro modo, con otras palabras…